El Museo Oscar Niemeyer inaugura, el 22 de junio, la inédita exposición “Agujero en el Cielo”, del artista visual Túlio Pinto. Realizada por el MON, en el espacio del Ojo, reúne 32 esculturas e instalaciones, algunas de ellas de gran tamaño, que exploran el poder de lo tridimensional. La curaduría es de Roberta Stubs.
“El visitante se dará cuenta de que esta exposición es casi una ilusión óptica en la que el artista promueve un diálogo insólito entre materiales de distintas valencias. Hace que lo pesado parezca ligero, lo frágil se vuelve fuerte”, dice la directora-presidenta del Museo, Juliana Vosnika.
“Mármol y acero están uno al lado del otro, las vigas de hierro parecen flotar y coexistir con láminas de vidrio, en una construcción casi poética”, dice. Como en un truco de ilusionismo, el público puede sentirse hipnotizado por el escenario y probablemente se verá inducido a una mirada reflexiva.
Según Juliana, cuando el artista nos sorprende con la posibilidad de equilibrio y armonía entre agentes de naturalezas opuestas, su obra cumple el rol, así como la institución que la alberga y la acerca al público. “Una de las funciones del arte es instigar y transformar a las personas”, comenta.
Para la secretaria de Estado de Cultura, Luciana Casagrande, la nueva exposición consolida al Ojo como un espacio expositivo cada vez más diverso e interesante para el público. “En cada exposición, el visitante tiene una experiencia diferente. Es un privilegio para el Estado contar con un espacio tan noble y democrático al mismo tiempo. Ahora le toca a Túlio Pinto, un artista premiado y reconocido internacionalmente, dejar aquí su huella”, dice.
La Curadora de la muestra comenta que la exposición “nos llama a cruzar mundos y abrir un canal entre universos muchas veces disonantes”. Para ella, estar frente a la obra de Túlio Pinto es compartir un estado de suspensión con materialidades sólidas que parecen flotar.
“Mover nuestro cuerpo entre sus esculturas e instalaciones es transitar por un tiempo y un espacio interrumpidos, donde las leyes de la física, regidas aquí por una lógica diferente, dan paso a un encantamiento en estado de alerta”, dice Roberta.
Sobre las obras
Vigas de acero que cruzan el espacio y placas de vidrio que hacen equilibrio entre piedras y cables de apoyo. Estar frente a las obras de Túlio Pinto es como caminar en un jardín suspendido compuesto de materialidades sólidas que parecen flotar en el tiempo y el espacio.
Elementos dispares construyen entre sí una cierta complicidad que sorprende por la tensa alianza que se establece entre naturalezas disonantes como la piedra, el hierro, el vidrio, el aire, el mármol y el cuerpo. Hábil en la creación de estructuras casi arquitectónicas, el artista establece campos de tensión que cuestionan las categorías de orden y funcionalidad.
Sólidas y transparentes, algunas obras adquieren un aire de opacidad cuando se invierten por el riesgo de caída (o incluso de rotura) que amenaza la estabilidad de los diferentes pesos y medidas que componen las obras. Túlio Pinto sorprende con el dominio que ejerce sobre materialidades rígidas como el acero, el vidrio y el concreto. Un dominio que viene dado por la fuerza de la flexibilidad de los materiales llevada al límite.
En muchas obras, está la resistencia del vidrio estirada al extremo por la rigidez del acero. A simple vista, es el aire el que parece soportar el peso de estas vigas rígidas o bloques que flotan frente a la vista. Al desplazar funciones y provocar otros órdenes, las obras de Túlio Pinto borran la superficie de las apariencias e introducen dudas e incertidumbres en el lugar del pensamiento lineal.
Sobre el artista
Túlio Pinto (Brasília, 1974) se graduó en Artes Visuales con énfasis en escultura en la Universidad Federal do Rio Grande do Sul (UFRGS, 2009). Vive y trabaja entre Porto Alegre y São Paulo. Entre sus exposiciones, se destacan: “13ª Bienal del Mercosur: Trauma, Sueño, Fuga” (Porto Alegre, 2022); “Encuentros Divergentes” (Museo de Arte Contemporáneo de Sorocaba, Sorocaba, 2021); “Glass and Concrete” (Marta Herford Museum, Herford, Alemania, 2020); “Momentum” (MARGS – Museo de Arte do Rio Grande do Sul, Porto Alegre, 2019); “Onloaded: Túlio Pinto” (Phoenix Institute of Contemporary Art – phICA, Phoenix, Arizona /EE.UU, 2015); “Bienal de Vancouver” (Vancouver, Canadá, 2014); “De Territorios, Abismos e Intenciones” (Proyecto RS Contemporáneo – Santander Cultural Porto Alegre, Porto Alegre, 2013); “CEP: Cuerpo, Espacio y Camino” (9ª Red Nacional Funarte, 2013); “ Salvaje – Digesting Europe Piece by Piece” (Traneudstillingen Exhibition Space, Copenhague, Dinamarca, 2012); “Transposición” (Galería Augusto Meyer – Casa de Cultura Mário Quintana, Porto Alegre, 2012); “Nueva Escultura Brasileña” (Caixa Cultural Rio de Janeiro, Rio de Janeiro, 2011); entre otras. Su obra forma parte de colecciones nacionales e internacionales, entre ellas: Usina de Arte, Pernambuco; Instituto Figueiredo Ferraz, Ribeirão Preto; Museo de Arte Contemporáneo de Paraná, Curitiba; Museo de Arte Contemporáneo do Rio Grande do Sul, Porto Alegre; MARGS – Museo de Arte do Rio Grande do Sul, Porto Alegre; Museo Nacional de Brasília; Museo de Arte de Ribeirão Preto; Fundación Pablo Atchugarry, Uruguay; Fundación Maria Cristina Masaveu Peterson, Madrid, España; Marta Herford Museum, Herford, Alemania; Piramidón, Centre d'Art Contemporani, Barcelona, Spain. En los últimos años realizó residencias artísticas en países como Ucrania, Canadá, Portugal, EE. UU, Reino Unido y Holanda.