Laboratorio de Conservación y Restauración


Museologia

Se encarga de la organización de las exposiciones temporales que se realizan en el Museo y del comisariado de todas las exposiciones con obras de la colección, tanto internas como itinerantes.

El trabajo del comisario consiste en elegir al artista y el tema de la exposición, dirigir la producción, planificar el espacio expositivo, definir la luz, la humedad y la temperatura, la cantidad de obras a exponer, la presentación de las obras y muchos otros aspectos.

La museología también cuenta con un historiador, que investiga y recopila diversa información sobre una exposición: las obras, el artista, otras exposiciones ya realizadas. Esta información se registra en un sistema especial. Forman parte de la memoria de cada exposición, que también contiene los documentos del proceso burocrático y técnico, materiales publicitarios, etc.

Parte de esta información está disponible para su consulta en el Centro de Documentación e Investigación.

Reserva Técnica

La reserva técnica alberga el corazón del Museo: su colección. En el MON hay más de 3.000 obras de importantes artistas del panorama nacional e internacional, que provienen en parte del Museo de Arte de Paraná – MAP y Banestado y de la colección Bozano, o fueron donadas y adquiridas.

Las obras pueden ser vistas por el público en exposiciones de la colección, realizadas dentro del MON o en otros museos. Y siempre que una obra sale de la reserva técnica, aunque sea para una exposición interna, es necesario seguir un estricto control de seguridad que implica, entre otros procesos, la autorización de salida y un informe técnico con las condiciones de conservación de la obra.

En el transporte, las obras son manejadas por montadores especializados, en equipos conformados por personal interno del MON y colaboradores tercerizados. Son profesionales formados para esta función, que llevan mascarillas y guantes para no dañar ninguna pieza.

El cuidado en el transporte es el mismo cuando el MON recibe exposiciones de otros museos. Las obras vienen en transportadores especiales, en compartimentos revestidos y climatizados. Los vehículos que realizan este transporte suelen ir acompañados de exploradores y cuentan con sistemas de comunicación por radar y satélite.

Es gracias a la eficiente seguridad y transporte de obras que el MON está preparado para albergar exposiciones de todo el mundo, brindando a los visitantes la oportunidad de admirar las obras más representativas de grandes artistas.

Laboratorio

Este sector se encarga de la limpieza, conservación, restauración y embalaje de las obras de arte del Museo, tanto en la colección como en las exposiciones temporales y permanentes. Para ello, el Laboratorio cuenta con modernos equipos, lo que convierte al MON en un referente en el trabajo sobre papel, pintura y escultura.

Es el Laboratorio el que define las condiciones en las que se expondrán las piezas, para garantizar su seguridad y conservación. Algunas obras, por ejemplo, no se pueden tocar porque incluso las manos limpias tienen grasa. Cuando tocamos una pieza, la grasa se acumula en su superficie, atrae la suciedad y puede provocar hongos. Si no es fuerte, puede deteriorarse.

Equipos como el termohigrógrafo y el termohigrómetro permiten verificar y controlar la humedad y temperatura del ambiente de colección o exhibición. Una variación muy brusca de estos dos índices puede causar un gran daño a una obra de arte.

La luz también necesita ser controlada. Se colocan filtros ultravioleta en lámparas y vidrios para evitar el envejecimiento prematuro en obras realizadas con materiales orgánicos como papel, lienzo o madera.

Otro equipo importante en el Laboratorio es el microscopio. Permite identificar si la obra tiene algún hongo, si está fisurada (con grietas) y la profundidad de la fisura.

Si una obra de arte está dañada, necesita ser restaurada. Este proceso implica varias técnicas, que dependen del tipo y la extensión del daño.

En la guía paso a paso a continuación, puede comprender cómo funciona la restauración de una pintura al óleo sobre lienzo de tela.

Pasos del proceso de restauración

El primer paso en el proceso de restauración es realizar una inspección visual de la obra. Se realiza un análisis visual del anverso y reverso de la obra para identificar su estado de conservación. Se examina su color, posibles suciedades, rasgaduras, cuarteaduras y el estado de la pintura.

Tras este primer análisis, se procede a la etapa de fijación de la pintura mediante diversos procedimientos, tanto temporales como permanentes, para que la obra no sufra daños durante la restauración.

Después de la fijación, viene el paso de proteger la capa de pintura con resina acrílica para evitar daños durante el proceso de desmontaje del marco y chasis.

Para cada tipo de obra existe un procedimiento de restauración diferente. Son ellos:

Aplanamiento

Se realiza para evitar abombamientos (alabeos). El proceso es realizado en la mesa de calor, con la pantalla sobre un chasis temporal envuelto al vacío con film de plástico resistente al calor y disolventes. El calor hace que el tejido sea más maleable y el vacío ayuda en el planeo, hasta el enfriamiento.

Reforrado

Es necesario aumentar la resistencia del tejido de algodón original. Se pega una tela con adhesivo al lienzo; los dos se envuelven y se colocan en la mesa de calor para aplanarlos.

Eliminación del reforrado

Si la obra ha sido restaurada previamente, puede haber un tejido pegado al lienzo. Esta tela se rasga y se quita con movimientos concéntricos para que la tela no experimente una presión excesiva y posibles grietas u otros daños.

Limpieza

Se realiza manualmente con el hisopo, un instrumento formado por un palillo de madera con punta de algodón. El hisopo se empapa en solvente para eliminar el barniz viejo, la suciedad y otros productos.

Colocación del chasis

Después de ser repintado, la obra se tiende sobre un nuevo chasis y se fija con tachuelas de latón, que no se oxidan.

Nivelación y reintegración cromática

Si el lienzo ha perdido su pintura original, estas zonas se nivelan con masilla niveladora. Posteriormente, reciben pigmentos específicos para la restauración, los cuales pueden ser removidos en un futuro procedimiento.

Aplicación de barniz

Las pinturas al óleo se cubren con barniz brillante y mate, especialmente para obras restauradas. Los temples no tienen aplicación de barniz, para conservar su característica opaca.

Marco y cierre trasero

La madera del marco es tratada contra insectos y con conservantes de madera. El fondo de la obra se cierra con un tablero de espuma sintética para mayor seguridad en el movimiento y para reducir la acumulación de suciedad y los efectos del cambio climático.

FAQ

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